Cuando hablamos del punto de venta hay personas que se hacen una idea más acertada que otras. El punto de venta es el lugar más importante del negocio, es el lugar físico donde se realizan las transacciones. Es la imagen de la marca, la primera impresión que el cliente tiene de la misma y el lugar donde se establece una relación del cliente con la marca, ya sea buena o mala. Aquí juega un papel fundamental la distribución y la apariencia del stand o la zona de venta, ya que la organización va a influir directamente en la percepción que el cliente tiene de la marca. Hoy vamos a buscar la mejor forma de optimizar el espacio del punto de venta para hacer que esa experiencia de relacionarse con la marca deje una huella positiva.

 

Cómo optimizar el espacio en el punto de venta

Optimizar el espacio en el punto de venta y organizarlo de forma correcta es vital, ya que una buena organización da una impresión impecable de la marca, mientras que la desorganización da una mala impresión de la marca. Un orden adecuado facilita la navegación tanto de los clientes como del personal a través del punto de venta.

Optimizar el espacio en el punto de venta incluye pautas como colocar la caja registradora en el punto donde menos se tarde en llega, reduciendo al máximo el tiempo de espera. Se debe evitar la sensación de “abarrotamiento” de productos para evitar abrumar al cliente y los errores de los vendedores. También se debe evitar que una zona aparezca mas poblada de productos que otra. Se debe buscar, en definitiva, que el punto de venta tenga una apariencia equilibrada, y el equilibrio transmite paz, comodidad y atractivo.

Para optimizar el espacio del punto de venta podemos optar por diferentes estrategias. Vamos a desgranar cada una a continuación.

 

-Rotación de inventario.

La novedad es atractiva. El punto de venta será más atractivo a los potenciales clientes si se realiza una rotación de los productos. Esto se realiza actualizando constantemente los productos que se están exhibiendo en las demostraciones o mostrando en las zonas más visibles productos novedosos que vayan actualizándose constantemente. Esto transmite una sensación de novedad y frescura que invita a los clientes a volver para descubrir las siguientes novedades.

-Diseño ergonómico del stand.

Sobre todo, en lo que al pago se refiere. Se debe organizar el punto de venta de tal forma que el tiempo de espera para realizar el pago sea menor posible, evitando esperas. Por otro lado, es importante que los clientes tengan espacio suficiente para soltar sus productos durante el tiempo que dura la transacción económica, haciendo que se sienta lo más cómodo posible.

-Uso de tecnología interactiva.

La tecnología avanza inexorablemente, para no quedar obsoleto es obligatorio subirse al barco. Hoy en día hay muchísimas opciones para aplicar tecnología interactiva al proceso de compra. Se pueden usar desde apps o códigos QR hasta pantallas táctiles para autoconsulta. Con estos medios se puede ampliar información sobre los productos o hacer recomendaciones personalizadas. Incluso algunos lugares facilitan la realización de compras online de su marca en el mismo punto de venta físico, donde puede asesorarle el vendedor.

-Señalización estratégica.

El correcto uso de la señalización en el punto de venta hará que la experiencia del cliente sea más placentera. Esta le ayudará a encontrar fácilmente los productos que busquen, además de poder señalizarles tanto las ofertas como las novedades. La señalización que se use debe ser intuitiva, sin demasiadas letras, rápida de ver y leer. Además, si se usa una señalización corporativa, usando la misma fuente en las letras o números y los mismos colores del logo, se refuerza la relación de la experiencia con la marca.

-Zonificación inteligente.

Por último, aunque no menos importante, vamos a ver esta estrategia para optimizar el espacio en el punto de venta. La zonificación inteligente se basa en la división de espacios temáticos, que faciliten el viaje de los compradores durante su compra reforzando una experiencia clara, limpia y positiva de compra. Se pueden crear zonas especiales, dedicadas a las ofertas o a las novedades, correctamente señalizadas como hemos comentado antes.

 

Para finalizar, sólo queremos recordar que la correcta organización y optimizar el espacio en el punto de venta es, más que una forma de ordenar un espacio para aumentar las ventas, una estrategia de marketing. En esta estrategia, se convierte el punto de venta en un lugar acogedor y atractivo que hace que el cliente se vaya con un buen sabor de boca y ganas, tanto de volver al punto de venta, como de recomendarlo a sus conocidos. Esto es lealtad a la marca y es el objetivo final de todas las estrategias de marketing, incluida la que desglosamos hoy aquí.